jueves, 15 de octubre de 2009

La Verdad.

Suenan fuertes las campanas, suenan fuerte sin cesar,
porque cesar ya se ha ido, ya se ha ido de verdad.
Que chistoso, que gracioso, que pavada tu crueldad,
son tus sueños que reprimen, que reprimen sin parar.

Todo cuento, todo verso, todo simple y nada mas,
son fronteras que se rompen, que se rompen por golpear.
Se alejaron los boludos, se acercaron hacia acá,
ya son muchos los que escriben, tu poesía sin pensar.

Fueron muchos, fueron pocos, ya no importa en realidad,
los que añoran en tus versos, algún día triunfaran.
Los mezquinos, los que envidian, los que joden sin oír,
nacen huérfanos en su vidas, mueren tristes al pasar.

Tus canciones, tu poesías, no me afectan, ya no mas,
es que no te diste cuenta, que te extraño mucho mas.
Egoísmo compartido, salpicado tu crueldad,
se retuerce de los nervios, y se muere en la verdad.