Divina Locura.

Ella es como un sueño que todos querrían soñar,
rompe con el molde cuando se la compara con las demás.
Ella no es perfecta, simplemente es realidad,
tan real como la nieve, la lluvia o algún mar.
Sus ojos que brillan como todas las estrellas,
su sonrisa que regala felicidad con simpleza.
Sus gestos de amor que son pura ternura,
sus curvas perfectas, su divina hermosura.
Ella lava mi tristeza, transformándola en ceniza,
me saca de los pozos, y me sube a su cornisa.
Ella crece cada vez mucho mas dentro de mi,
se hace grande, tan enorme, que ya no puedo sufrir.
Su belleza que es tan bella me consume la cabeza,
su elogios y su habla que la hacen tan directa,
su reproches, sus envidias, sus protestas no fastidian,
son tan lindas, son tan puras, como su divina locura.

Quererte.

Tengo un problema que se soluciona con verte,
con verte y quererte.
Tengo un vació que solo se llena con verte,
abrazarte y quererte.
Tengo un sueño que solo se realiza con verte,
besarte, abrazarte y quererte.
Tengo un espina que solo no pincha con verte,
reír, besarte, abrazarte y quererte.
Tengo mil cosas para darte con verte,
verte, reír, besarte, abrazarte y quererte.

Ella (y yo).

Ella le da luz a todas mis noches,
ella puede cambiar el tiempo si lo quiere.
Ella es sol que calienta cada amanecer,
y también es la luna mas bella del atardecer.

Ella es la canción que nadie se atrevió escribir,
Ella es la canción que nadie se animo a cantar.
Ella es el sueño que nadie intento soñar,
y también es el refugio que anestesia mi dolor.

Ella es común pero tan distinta a las demás,
ella desentona con su aura angelical.
Ella es veneno y medicina para mi corazón,
y siempre me ampara cuando algo anda mal.

Ella no es una reina, una princesa o algún Dios,
ella es el sueño que siempre vela por los dos.
Ella me muestra y me enseña que hay un lugar mejor,
y que donde estemos juntos seremos Ella y Yo.